Esta mascarilla nocturna se inspira en el acabado dewy skin que tanto buscan las coreanas: una piel jugosa y con aspecto saludable, que se aleja de los acabados mate y toscos. Te gustará mucho si tienes la piel seca o normal, o bien mixta y buscas un producto altamente hidratante. Que no te engañe el nombre: aunque contiene miel, esta mascarilla tiene una textura ligera, refrescante, casi como un gel. Es muy agradable como mascarilla nocturna, ya que se aleja de tener un acabado pesado y denso. Contiene un 87% de extracto de propóleo, un ingrediente muy acertado si tienes imperfecciones en el rostro ya que actúa como un potente ingrediente antibacteriano. Si tienes granitos o puntos negros tu piel agradecerá mucho que incluyas este ingrediente a tu rutina. Aunque la mayoría de mascarillas nocturnas tienen un formato tarro, esta viene en un practiquísimo tubo: más higiénico y fácil de aplicar ya que no tenemos que sumergir los dedos en el producto.
Cómo usar:
Aplica la cantidad de una almendra en los dedos y repártela por el rostro, cuello y escote. Hazlo como último paso en la rutina de la noche, unos minutos antes de irte a dormir. Por la mañana, nada más despertarte, retírala con abundante agua templada y sigue con tu rutina diaria.